En Lester sabemos que es bueno hacer una escapada de vez en cuando, ¿verdad?
El invierno es una estación magnífica tanto para estar en familia, como para hacer un poco de turismo. Además, nos ofrece paisajes realmente impresionantes que no podemos disfrutar el resto del año.
Por eso, a continuación os ofrecemos algunos consejos para preparar un viaje a la nieve.
Trucos para organizar la maleta
A la hora de comenzar con los preparativos del viaje, es posible que uno de los pasos más engorrosos sea hacer la maleta.
Cierto es que en verano es más sencillo no dejarte nada atrás, pues necesitas menos cantidad de ropa. En cambio en invierno, las prendas se multiplican no sólo en número, sino también en peso.
Obviamente el tamaño de tu maleta dependerá de la duración del viaje, ya que no es lo mismo una escapada de un fin de semana que pasar dos semanas haciendo turismo.
Para facilitarte el proceso, vamos con unos consejos para preparar nuestra maleta para un viaje a la nieve.
En primer lugar, es importante proteger todos los líquidos y cremas en un neceser hermético. De lo contrario, podría ocurrir alguna sorpresa que nos estropease el viaje.
Tetris con las prendas
Hay algunas prendas que debemos doblar a conciencia, como es el caso de las camisetas y las camisas, que de hacerlo mal, pueden quedar demasiado arrugadas.
Las prendas más duras y resistentes deben colocarse al fondo de la maleta. Un truco muy útil es colocar los zapatos cerca de las ruedas, para construir una maleta equilibrada.
Para aquellas personas que no puedan resistirse a llevar mucha ropa, es recomendable enrollarla. Para situarlos correctamente, habrá que colocarlos en paralelo. Así, cada pieza estará más compacta y no ocupará tanto espacio.
La ropa interior y los complementos pueden introducirse entre los huecos libres de las prendas. Como por ejemplo, encajar los calcetines en el interior de los zapatos, ¡es un truco muy provechoso!
¡Y recuerda dejar un hueco en tu maleta!, que ya tendrás tiempo de llenarlo con recuerdos y regalos.
Básicos imprescindibles
¿Aún no tienes claro cuánta cantidad de ropa necesitas? Como guía orientativa para un viaje de aproximadamente una semana, te recomendamos llevar tres conjuntos combinables entre sí.
Deben ser prendas que no nos limiten a un solo uso, es decir, escoge piezas básicas de fondo de armario y colores neutros. En Lester, encontrarás las camisas sport ideales para utilizar como básicas.
Respecto al calzado, no dudes en llevar unas sneakers para las caminatas, unas botas de trekking para la montaña y unos zapatos de carácter formal para la tarde-noche.
Por supuesto, los básicos de la nieve: ropa especial -anorak o el mono clásico- y térmica, una braga para el cuello, los guantes, un gorro y crema protectora e hidratante.
Si disfrutas de los deportes en la nieve, llévate tu equipo y ropa especial. En caso de no tener el equipo adecuado para el deporte que quieras realizar, ¡no te preocupes! Tendrás la oportunidad de alquilar el equipo que necesites en los lugares donde se practican estos deportes.
Nunca subestimes las bolsas organizadoras de equipaje, pueden ser de gran ayuda. Si todavía tienes complicaciones con el espacio, hay bolsas que comprimen la ropa con un sistema de envase al vacío. ¡Así de fácil!
También es recomendable mantenerse en forma con la llegada del frío. En Lester, tenemos el artículo ideal para que puedas hacer cómodamente en casa unos ejercicios básicos para ayudarte en tu viaje a la nieve.
Por último, si vas a viajar en coche no olvides hacer una revisión previa del vehículo y llevar las cadenas. También es recomendable calcular diferentes rutas, por cuestiones meteorológicas o por si hay alguna carretera cortada.
Por cierto, ¡no te dejes atrás la documentación y la cámara de fotos!
¡Anímate a hacer deporte!
La llegada del invierno es la excusa perfecta para practicar deportes y disfrutar al aire libre.
No necesitas ser un atleta olímpico para realizar deporte. Así que aquí os dejamos algunos de los deportes de invierno más practicados y de diferentes estilos que te encantarán.
Alpinismo
Este deporte consiste en escalar montañas de gran altura, y existen multitud de modalidades. Destacamos aquellas que se realizan en invierno, la escalada sobre hielo y el esquí de travesía.
El primero se caracteriza por la superficie casi vertical y la dureza del hielo, para lo que se necesita el uso de crampones -para evitar el deslizamiento- y piolets -para clavar sobre el hielo-.
El segundo, es una mezcla entre el alpinismo y el esquí. Consiste en ascender una pendiente con el equipo de esquí para luego deslizarse. Una disciplina olímpica reconocida desde 2019.
Un factor importante a considerar, es que los viajes a la nieve pueden suponer cierto riesgo. Por lo general, las avalanchas de nieve son frecuentes en la alta montaña.
Por este motivo, los alpinistas suelen llevar un dispositivo para avisar de su posición exacta bajo la nieve en una situación de emergencia. Es decir, es un dispositivo de búsqueda de víctimas de avalanchas.
Este aparato de seguridad es el ARCA, cuyas siglas provienen del francés (por ser uno de los países cuna del alpinismo) –Appareil de Recherche de Victimes d’Avalanches-. El ARCA es fácil de incorporar a mochilas de explorador o integrarlo en chaquetas más técnicas. Además, es posible comprarlo por separado.
Esquí
El esquí es quizá el deporte más conocido y practicado durante esta época. Varios de sus estilos de competición están reconocidos por el Comité Olímpico Internacional, como el esquí de fondo y el esquí alpino.
Es aconsejable contratar un curso de esquí para aquellas personas que sean principiantes, ya que con las indicaciones de un profesional aprenderás más rápido. De esta forma, vas a aprovechar mejor tu tiempo, no cogerás vicios en tu técnica y sentirás mayor seguridad.
*Por cierto, ¿ya tienes claro que tu próxima aventura será esquiar, pero no sabes qué lugar nuevo visitar? Descúbrelo en “Las mejores estaciones de esquí de España”.
Snowboard
Si buscas algo más atrevido, deberías lanzarte a probar el snowboard. Es similar a patinar o a surfear pero en la nieve. Básicamente es deslizarse por una superficie nevada e inclinada sobre la que hacer acrobacias.
Es un deporte extremo de invierno ideal para los amantes del esquí, aunque se debe ir siempre bien preparado por los peligros que albergan. No obstante, es una de las prácticas más divertidas para hacer en invierno.
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