Los vinos biodinámicos se caracterizan porque siguen los principios del padre de la agricultura biodinámica, el filósofo Rudolf Steiner. Para él las granjas y bodegas son como organismos complejos cuya dinámica natural incluye a los animales y al hombre y los entiende como un todo holístico, un sistema en equilibrio que hay que preservar. La elaboración de estos vinos requiere de más recursos y cuidados de la viña incluso que la de los vinos ecológicos y orgánicos. La idea principal es estimular la salud de la viña para que las enfermedades no sean un problema, tener viñedos equilibrados naturalmente, sanos.
La primera bodega que aplicó los principios biodinámicos fue la familia Saahs, de la bodega Nikolaihof, en Austria, en el año 1970. En la producción de los vinos biodinámicos se utilizan preparados vegetales y minerales como aditivos de fertilización y el uso de un calendario astronómico que rige las épocas de siembra, cura y cosecha de la uva. Todo compuesto que se utiliza en la elaboración de estos vinos es obtenido de la naturaleza sin intervención de procesos industriales.
Preparados biodinámicos
Steiner prescribió nueve preparados diferentes para ayudar a la fertilización. Son la piedra angular de la agricultura biodinámica y los describió exactamente cómo debían ser preparados.
Estos preparados están enumerados del 500 al 508. Los dos primeros se utilizan para la preparación de los campos, mientras que los otros siete se utilizan para hacer compost.
- 500: mezcla de tierra negra dentro de un cuerno de vaca que se entierra a 40 a 60 cm bajo la superficie en otoño. Se deja descomponer durante el invierno y se recupera para su uso la siguiente primavera.
- 501: cuerno de vaca relleno de cuarzo molido en polvo. Se entierra en primavera y se saca en otoño. Se puede mezclar con el 500 pero usualmente se prepara solo (mezcla de una cucharada de polvo de cuarzo en 250 litros de agua). La mezcla se rocía a baja presión sobre el cultivo durante la temporada lluviosa, para prevenir enfermedades por hongos. Se debe rociar en un día nublado o a primera hora de la mañana para evitar que las hojas se quemen.
La biodinámica asegura que los ciclos de la luna tienen influencia sobre la vida de las plantas. Esto, en realidad, es una vuelta atrás a la agricultura tradicional. El calendario lunar, creado hace más de 50 años por Maria Thun, no es lo único que tiene en cuenta el calendario biodinámico. También se tienen en cuenta los astros y los efectos cósmicos de estos sobre las plantas. En palabras del mismo Rudolf Steiner, “es necesaria la armonía en la influencia de los astros para que la planta sea capaz de desarrollar correctamente en su interior el poder nutritivo y la fuerza reproductora”.
Bodega biodinámica
Las bodegas biodinámicas tienen algunas características propias a tener en cuenta.
La estructura de la bodega está construida con curvas, sin esquinas. Esto es porque las curvas representan la infinidad ligada al espacio. Por el contrario, las esquinas demuestran la muerte de dos líneas, el final de dos partes.
El pasto y la paja son elementos muy necesarios, sobre todo en la periferia de la bodega, ya sea en las paredes o en la misma tierra. Ambos absorben la energía del sol durante todo el día y luego, durante la noche, la transmitirán a todo el lugar.
Una de estas fantásticas bodegas es la de nuestros amigos de Quinta Sardonia, unos vinos increíbles que te puedes llevar a casa con el sorteo que se está celebrando ahora mismo, ¡no te lo pierdas!