Aunque en verano te des más de un capricho en tu restaurante a pie de playa favorito, en general es importante comer de forma saludable.
En Lester somos muy fans de la vida sana. Por eso, hoy te traemos una lista de alimentos bajos en calorías pero a la vez ricos en nutrientes. Seguro que ya sabes que las verduras engordan muy poco, por eso hemos decidido incluir otros alimentos en nuestra lista, como frutas, pescados y lácteos. Se puede comer sin engordar pero variado.
Recuerda que para estar sano no es necesario pasar hambre ni hacer sufrir al paladar. Así que anímate a combinar estos alimentos en recetas que te hagan disfrutar de tus comidas.
Carnes
La pechuga de pavo solamente aporta 80 calorías por cada 100 gramos. Además es rica en proteínas, que son indispensables para ganar músculo.
Aunque tiene algo más de calorías, 170 por cada 100 gramos, en realidad el conejo es de las mejores carnes que puedes consumir, debido a su alto contenido en proteínas y hierro.
Te sorprenderá que incluyamos el jamón serrano en esta lista, pero lo cierto es que 100 gramos solo tienen 190 calorías. Si lo consumes con moderación, te aportará también proteínas para los músculos, calcio, fósforo y potasio. Además está buenísimo.
Pescados
El pescado blanco es el más bajo en calorías. Dentro de este grupo, destacamos el bacalao con 74 calorías por cada 100 gramos. Tiene muy poca grasa y es una buena fuente de proteínas, potasio, fósforo y selenio. Además se puede preparar de muchas formas diferentes.
Otros pescados que engordan poco son la pescadilla, la dorada o el lenguado. Se trata así mismo de alimentos con buenos aportes de minerales.
En cuanto a mariscos, los berberechos, las almejas o los langostinos son alimentos saludables, pero destacamos los mejillones, que aportan 86 calorías por cada 100 gramos. Además son una magnífica fuente de omega 3, por lo que ayudan a reducir el colesterol y favorecen la prevención de enfermedades cardiovasculares. Como el paladar también es importante, no olvidemos que están deliciosos al vapor con un chorro de limón.
Verduras
Las verduras de hoja verde son de los alimentos que menos engordan. Puesto que cada una aporta nutrientes distintos, es importante consumir variedades diferentes.
Las acelgas solamente tienen 17 calorías por 100 gramos y las puedes comer en ensaladas o en caldos. Además son una buena fuente de vitamina C y potasio. Otros alimentos que forman parte de este grupo son las espinacas (26 calorías por cada 100 gramos), la lechuga (15 calorías por cada 100 gramos) o el kale (49 calorías por cada 100 gramos).
Además de aportar pocas calorías, las verduras de hoja verde tienen otros beneficios para nuestra salud. Por ejemplo, el kale y la lechuga nos ayudan contra el insomnio.
El apio solamente contiene 15 calorías por cada 100 gramos y es un alimento muy versátil. Lo puedes comer crudo pero también puede formar parte de tus ensaladas o puedes consumirlo en cremas. Otras verduras que engordan poco pero muy ricas en nutrientes que no deben faltar en tu dieta son las zanahorias, las berenjenas, el brócoli, la cebolla o el calabacín.
Frutas
Nada mejor para terminar una buena comida de verano que una pieza de fruta fresca. Manzanas, melocotones, kiwis… todas ellas están riquísimas, son bajas en calorías y se pueden disfrutar a cualquier hora.
El melón es una de las frutas más sabrosas del verano y solamente aporta 36 calorías por cada 100 gramos. Puedes comerlo como postre, como parte de una ensalada, en cremas y está riquísimo con jamón.
Una de las frutas que menos engorda es la fresa, solo aporta unas 32 calorías por cada 100 gramos. Además, las fresas tienen un alto poder diurético y una gran riqueza mineral. Están deliciosas solas pero también mezcladas con yogur natural o con skyr.
Lácteos
A pesar de que el queso tiene la reputación de ser un producto que engorda, se trata de un alimento rico en proteínas. Muchos culturistas lo consumen porque contribuye a que el cuerpo gane músculo. Para aprovechar los beneficios del queso y minimizar los posibles riesgos, se recomienda consumir queso fresco, siempre con moderación.
Un truco consiste en consumirlo en recetas elaboradas con otros alimentos bajos en calorías. Por ejemplo, puedes preparar una ensalada con calabacín y queso fresco, o puede acompañar a los melocotones o a la pechuga de pavo.
Una buena alternativa es el skyr, un lácteo típico de Islandia. Su consistencia es parecida a la del yogur griego, pero con un sabor más suave. Aunque está clasificado como un queso fresco, se puede consumir como un yogur.
Un yogur natural tiene unas 70 calorías por unidad y si es desnatado solamente alrededor de 50 calorías. Puedes comerlo solo o combinarlo con arándanos, fresas u otros frutos rojos; un postre sano y delicioso.
Aunque comprar alimentos preparados ultraprocesados siempre será más rápido, con muy poco esfuerzo puedes introducir en tu dieta alimentos que engordan poco. Notarás la diferencia en tu salud y en tu ropa.