A día de hoy, muchos nos hemos visto arrastrados a teletrabajar de un día para otro. Esta situación está provocando que esas reuniones de negocios o con tus compañeros de trabajo hayan pasado de ser en persona a que se produzcan en tu sala de estar, cocina o despacho en casa.
Estas videoconferencias pueden ser positivas dado que satisfacen la interacción personal de los trabajadores, pero que pueden ser incómodas por diversos aspectos.
Desde Lester somos muy conscientes de todo lo que supone cambiar nuestra rutina y el enfrentarnos a las videollamadas, por lo que os traemos una serie de pasos y sugerencias a tener en cuenta para que estas sean exitosas:
Vístete de forma apropiada
Es importante elegir bien la ropa con la que vamos a realizar las videollamadas. Por ello, el mejor consejo que podemos daros en este aspecto, es adecuar la apariencia a la de las personas con las que estemos tratando o trabajando, sin dejar de lado la tan necesaria comodidad.
El dilema de la cámara
Tenemos que ser muy conscientes de que cuando se realiza una videollamada, es una situación social incómoda para todos los integrantes de la misma.
Para que esta fluya y sea más natural, es más que recomendable que todos los integrantes de la misma la tengan encendida para que todos los participantes se puedan ver con claridad.
Las formas son más importantes que el fondo
La selección del lugar para realizar la videollamada puede ser un auténtico quebradero de cabeza para aquellos que no dispongan de una oficina o despacho en casa.
El consejo más importante en este aspecto, es seleccionar un lugar que no genere distracciones y donde no se vea ningún artículo personal que no se desee mostrar.
En el caso de que esta reunión sea con un cliente nuevo o potencial, será necesario ser más exigentes con el fondo que queremos ofrecer, intentando proporcionar el mejor entorno posible y tratando causar una buena primera impresión.
La luz, esa gran aliada
Tener un soporte para luz, o la luz que entra por la ventana, son un añadido fantástico para sumar a la ecuación. Esta, te permite mostrar mejor tus expresiones faciales (muy importantes) y mejorar tu apariencia.
Potencia las presentaciones
Aunque parezca obvio, asegúrate de que los participantes que no se conozcan se presenten entre sí. Este sencillo factor es fundamental para que todos los integrantes se sientan más cómodos.
El respeto es una herramienta poderosa
Que una reunión no se produzca de forma física no significa que debamos olvidar el respetar al resto de integrantes. Mirar constantemente el teléfono o escribir en el ordenador es incluso más molesto cuando estás participando en una videollamada.
Desactiva las notificaciones y cualquier programa que pueda tentarte a hacer otra cosa mientras transcurre la reunión.
El micrófono no se silencia solo
Es muy importante que un micrófono tenga la calidad adecuada, pero aún lo es más acordarse de silenciarlo cuando uno no se encuentra hablando. Nadie quiere oírte bebiendo, masticando o respirando.
Ten en cuenta ofrecer siempre varios segundos para que una persona active su micrófono, ya sea para responder a una pregunta o para intervenir.
Esperamos que, con estos consejos y protocolo a seguir, vuestras videoconferencias sean todavía más exitosas.
